Dos árabes toman el puente áere entre las ciudades de Washington y Nueva York. Uno se sienta en la ventana y el otro en el medio. Antes de despegar, llega un pequeño israelita y se sienta en el asiento del pasillo, junto a los árabes. Se quita los zapatos y mueve los dedos de los pies. El árabe sentado junto a la ventana dice:
- "Creo que ire a por una galleta"
- "No hay problema. Yo se la traeré", dice el judio
Mientrás que el judio va a por la galleta, un árabe coge un zapato del israelí y escupe en él.
"Creo que yo tomaré una Coca-Cola", dice el otro árabe.
De nuevo el israelí se ve obligado a ir a por ella y, mientrás no está el otro zapato del israelí y escupe en él. Vuelve el israelí con la Coca-Cola. Todos reclinan los asientos y disfrutan del corto vuelo hasta Nueva York.
Cuando el avión estaba tomando tierra, el israelí introduce los pies en los zapatos y se da cuenta de lo ocurrido.
"¿Por cuánto tiempo seguira esta así?", piensa el israelí, "Esta enemistad entre nuestros pueblos ... este odio ... esta animosidad ... este escupir en los zapatos y orinar en Coca-Colas"