La Piel de Toro.-
He estado en toda la costa de la piel de toro así como los archipiélagos Balear y Canario. ¿En toda? ¡No! Sólo donde hay centrales eléctricas (casi toda). Tendré que volver a los mismos lugares para conocerlos como turista.
No se actualmente, pero cuando trabajaba en la isla de Tenerife, la mayoría de las gasolineras cerraban los domingos y, quedaban muy pocas abiertas.
Un domingo (en el que me enteré de esto), empecé a buscar una gasolinera cuando el indicador de combustible marcaba medio depósito y, vi muchas pero, todas cerradas. ¡Casi me quedo sin 'chicha'! Por fin encontré una abierta cuando estaba rozando la angustia y me acordé del siguiente chiste:
¿Recuerda aquellos antiguos surtidores de gasolina? Solían tener una larga manguera.
Unos extraterrestres estaban preparando un ataque al planeta Tierra. Antes de comenzar el ataque y, simplemente para ser 'educados' el comandante de la expedición envia un emisario.
El emisario era portador de un ultimátum para los habitantes del planeta Tierra, pero, por casualidad, aterrizó junto a uno de estos antiguos postes de gasolina y, pensando que era un ser humano, comenzó su discurso:
" ... y deben saber que somos muchos más que ustedes y muy poderosos. Mejor que se rindan y así evitar la lucha ..." y bla., bla., bla.
Por supuesto, no obtuvo ninguna respuesta del surtidor y volvió a donde era esperado por el comandante.
“¿Les has dicho nuestras condiciones a los terrestres?” preguntó el comandante.
“Por supuesto que lo hice” replicó el emisario.
“¿Y cuál fue su respuesta?” preguntó de nuevo el comandante.
“Bien, no respondieron absolutamente nada” respondió el emisario.
“¡Que pelotas tienen estos terrestres!” exclamó el comandante.
“¡Bien, pelotas no se!” dijo el emisario “¡pero que polla. Les da dos vueltas al cuello y se la cuelgan de la oreja!”
El Campo de Gibraltar.-
Voy a prestar especial atención a esta comarca de la piel de toro. ¿Por qué? Pues por lo siguiente.
De las siete localidades que componen esta comarca gaditana, una de ellas, Los Barrios, tiene el mismo patrón que Madrid, San Isidro Labrador, y resulta que llegué a ella el día 15 de mayo de 1994, día en que se celebra su festividad. Todo el pueblo estaba de festejos y yo pensé:
"Aquí estamos, a pasar cinco días por esta zona".
Pensé en cinco días pero finalmente estuve CINCO AÑOS. El Campo de Gibraltar se convirtió en mi segundo hogar.
Tenía un compañero de trabajo con el que hice gran amistad. Se llamaba Yacek y era polaco. Dado su desconocimiento del idioma español (al menos eso pensaba yo hasta que, un día, saliendo tarde de la central eléctrica donde trabajabamos dijo, señalando a una parada de autobús en la cual se encontraban unas chicas:"Piligües" (¡ya!, o izas, o rabizas, o colipoterras, pensé yo)).
Bien, como iba diciendo, a Yacek le traducía al inglés lo que necesitaba del español, pero es que el español de estos 'quillos' es tan cerrado que, ni yo les entendía. Solíamos comer en un bar de la Línea de la Concepción y le preguntaba al camarero que había. Me lo decía pero no le entendía nada. Total que, para saber que había, mire lo que estaban tomando otros y a Yacek le dije que había 'Sopa de picadillo' y de segundo 'Fritura de pescado'. Y así lo tuve durante muchos años comiendo sopa de picadillo y fritura de pescado, hasta que un día me dijo:
"Esta gente debe de tener un depósito de 10.000 litros de sopa de picadillo en la azotea".
Ámsterdam.-
Durante algún tiempo he estado viviendo en la capital de los Países Bajos. Es una ciudad muy bonita y la capital de los Países Bajos.
Ámsterdam es también conocida como "La Venecia del Norte" por sus más de 100 kilómetros de canales, unos 1500 puentes que los cruzan y alrededor de 90 islas.
En Ámsterdam se encuentran muchos museos de fama internacional. También se encuentra la Casa de Ana Frank y la conocida fábrica de cerveza Heineken, que también tiene su museo.
Pero sin duda por lo que destaca Ámsterdam es por ese compendio de 'monumentos' conocido como el Barrio Rojo.
Bruselas.-
Ciudad de México.-
NOTA.- No tengo muchas fotos de México, DF, ya que la policía me las hizo borrar de mi cámara digital.
Había dejado de trabajar para INDRA hacía unos meses y estaba en mi casa de Pittsburgh. En determinado momento me dije:
"Lousy, no puedes estar aquí sin hacer nada, vete a dar una vuelta por el mundo a ver si encuentras algún trabajo. Mira, sobretodo, bien en las papeleras".
Dicho y hecho, me fui al aeropuerto y desde allí volé a Chicago, de aquí a Houston y finalmente a Ciudad de México (antes México, DF).
Cuando salí de Pittsburgh, la temperatura era de 4ºC y al llegar a Ciudad de México, la temperatura era de 35ºC. Un gran cambio en tan pequeño intervalo de tiempo.
La ciudad goza de una gran inseguridad (en el resto del país la inseguridad es mayor y, sólo una zona, La Ribera Maya, debido a la gran fuente de ingresos que genera el turismo, está superprotegida por la policía).
Dado ese carácter que tengo de 'meter las narices dónde no me llaman', pronto me fui a recorrer la ciudad. Una tarde, deje el metro y para ir al hotel, tuve que recorrer en la oscuridad una larga avenida e, increíblemente, no tuve ningún percance.
En tema de seguridad la ciudad goza de grandes peculiaridades.Por ejemplo:
- Es típico que el propio conductor de un taxi te asalte. Así, era normal llamar a la compañía de taxis para pedir uno y requerir el número de matrícula del vehículo que van a mandar.
- La uniformidad en la policía era terriblemente curiosas. Me fije en una pareja de policías que caminaba por la calle y, mientras uno portaba un revolver, el otro llevaba una escopeta de caza cargada con ... posta.
Estaba hospedado en el entonces hotel Ciudad de Sevilla (cadena Meliá. Vaya con la influencia española). En la escalinata y bien entrada la tarde, para llevarse algo a la boca, una mujer se ponía a tejer muñecas ataviadas con trajes regionales. Realmente no necesitaba ninguna pero sentí pena por ella y la compré una. A la vuelta a Pittsburgh se la regalé a una gran amiga.